Manchester United y Chelsea se verán las caras este sábado en Old Trafford para luchar por el liderato de la Premier League. Será un encuentro vital para ambos conjuntos de cara a la consecución del título liguero.
Es sin lugar a dudas el partidazo de la jornada y el choque estará marcado por la auténtica semana negra por la que están pasando los 'red devils'. El United se dejó remontar ante el Bayern de Múnich en Champions y además perdió por lesión a su pieza clave, Wayne Rooney. A falta de seis jornadas para que finalice la Premier, sólo un punto separa tanto a Manchester United como a Chelsea, que son primero y segundo respectivamente en la clasificación.
Llega el momento de la temporada en donde los equipos tienen que dar el 'Do de pecho' y el United no puede llegar en peor momento. Sir Alex Ferguson conoció hace unos días que no podrá contar con Rooney hasta dentro de unas semanas. El internacional inglés se lesionó en el Allianz Arena y estará en el dique seco al menos tres jornadas.
La lesión llega también en muy mal momento para Rooney. El delantero estaba cuajando una temporada espectacular y a base de tantos iba directo a conquistar la 'Bota de Oro'. Máximo goleador en la Premier con 26 dianas, su principal perseguidor es Didier Drogba (dos tantos menos que el inglés), que intentará también arrebatarle el trono en la clasificación de 'killers'. Dejando los números a un lado, los de Carlo Ancelotti tienen una buena oportunidad para recuperar el liderato que perdieron hace varias semanas debido a una crisis de resultados por la que atravesó el conjunto 'blue'.
Oportunidad para Berbatov
Ferguson apostará por Dimitar Berbatov para sustituir a Rooney. El atacante búlgaro tiene una nueva oportunidad para demostrar tanto a su parroquia como a su entrenador que es un jugador valioso para el Manchester United y que también puede ayudar al equipo con sus goles.
Los locales tendrán que lidiar ante un equipo que llega de endosar un 7-1 al Aston Villa y de tener más días para preparar este encuentro tras su eliminación en Liga de Campeones ante el Inter de Milán.
